Lunes 16 de enero de 2023
Por : Maritza Villegas
Ciudad Valles.- Es enero y durante estas fechas comienza el estiaje, pero este año pesa sobre el afluente, la sequía extendida que no ha dado tregua desde hace casi cinco años en la Huasteca Potosina.
Este lunes, la escala del río Valles en estación Santa Rosa registró 51 cm, tres menos que el pasado 05 de enero. La falta de precipitaciones y las altas temperaturas de 30°C de este invierno, aceleran el consumo del afluente que ya se observa como un espejo a punto del secado. Si seguimos a ese ritmo para la segunda quincena de febrero estaríamos llegando a la escala crítica mínima de los 40 cm, es decir, un mes antes de los previsto si lo comparamos con el año anterior.
El Monitor de Sequía de la Comisión Nacional del Agua calificó a la Cuenca del Río Valles: Ciudad Valles, El Naranjo, Tamuin y Ébano, con impacto dominante de sequía severa durante todo el año 2022; a excepción de diciembre, que logró disminuir a anormalmente seco. Sin embargo, existe un alto riesgo de que la situación se complique, debido a que no hay pronóstico de lluvia para los próximos tres meses, es decir, estaremos por debajo de la media histórica en precipitaciones.
El impacto. Los acuíferos no lograron sobrecargarse, y hoy se tienen reportes de prestadores de servicios que indican que el río a dejado de fluir, como en la Cascada El Toro, en el Paraje Micos, sólo dos veneros cuesta abajo mantienen activa la Cascada, ¿pero, cuánto podrá mantenerse este caudal?...
Recordemos que la Cuenca es la única fuente de abasto para esta región, no existen presas o vasos de almacenamientos para regular los escurrimientos del afluente.
El agua es utilizada por todos.
La Dirección del Agua Potable y Alcantarillado (DAPA) ante la falta de infraestructura para esa acción sólo realiza bordos a lo largo de la zona de bombeo del río para garantizar el agua para la población. La escala del río en esa zona hoy marcó los 65 cm; su escala crítica mínima es de 50 cm, una vez que llega a ese nivel se tienen problemas en el bombeo. Necesario que las autoridades comiencen con un plan del cuidado del agua, con acciones verdaderamente enfocadas a su ahorro. La desesperación de no tener agua puede llevar a situaciones inimaginables, como la ocurrida el año pasado en la capital potosina donde fue asesinado un pipero, cuando se negó a entregar el vital líquido por falta de abasto. Y no, tampoco queremos ser un Monterrey, que tuvo que bombardear las nubes para obtener agua.
El campo también tiene derechos. No se vale satanizar a todos los productores, pero se debe trabajar en la tecnificación del campo. No perdamos de vista que vivimos en una zona dedicada a la producción de caña de azúcar, que aunque una gran parte del cultivo es de temporal, hay productores que usan todavía canales de riego, que no tienen un control sobre la cantidad de agua que pueden absorben sus cultivos. No pasa lo mismo con los sistemas de riego o de aspersión, que están bajo la regulación y monitoreo constante de la Conagua como lo hemos visto en los últimos años, que ha llevado a sanciones severas contra aquellos que no respetan el tandeo y la veda durante Semana Santa.
La industria de la caña de azúcar, es la actividad económica que mueve a gran parte de la región,
tan sólo el año pasado se lograron cosechar 4 millones 305 mil toneladas, correspondiente a los Ingenios de San Miguel (El Naranjo), Plan de San Luis y Plan de Ayala (Cd. Valles), con un valor económico de más de 3 mil millones de pesos, que permite la generación de empleo de cientos de familias de la zona.
El valor económico del agua en la industria no sólo es en el campo, también en el uso que efectúa la Hidroeléctrica "Camilo Arriaga", en El Naranjo. El 13 de abril del 2022, la Conagua a través del Comité Técnico de Operaciones de Obras Hidráulicas tuvo que pedir a esa Central Eléctrica que adecuará sus acciones de rectificación de consumo, debido a que estaba afectando al río durante la época más crítica de abasto, situación que atendió a regañadientes. Esperemos que este año no pase lo mismo y entienda que el agua, es de todos.
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